No recibir palabras amables que te dirige tu pareja. Las que «queremos oír».
Encontrar un problema para crear una discusión, porque las cosas han ido demasiado bien últimamente.
Sacar a relucir cosas con queja en lugar de manejar mejor nuestras emociones y reconocer lo que es importante y necesario comunicar frente a lo que «no lo es».
No darnos cuenta de las acciones que toma nuestra pareja para demostrar que se preocupa, nos ama y aprecia, en cambio, centrarnos en lo que está haciendo mal o en lo que hizo mal.
Acusar a tu pareja que miente, que te manipula o que esta traicionándote en lugar de ser claro con respecto a tus necesidades y tus límites, y manejar mejor tus emociones con respecto a lo que te provoca ira, miedo.
Es importante identificar ¿Un trauma? O lo que no se siente seguro para ti.
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